Ropa de trabajo para el sector químico

Los riesgos aumentan en la industria química y por ello, las protecciones deben ser mayores. Se deben evitar salpicaduras, proyecciones, quemaduras, siendo el vestuario fundamental para impedir este tipo de accidentes. El cuerpo del trabajador debe estar cubierto casi en su totalidad a lo largo de su jornada laboral, por lo que estudiamos cuidadosamente la elección de los materiales. Los botones y bolsillos de estas prendas no pueden quedar visibles, quedarán protegidos por una capa de tejido o en el interior de la prenda.

La utilización de trajes completos, como buzos, favorece el desarrollo del trabajo y evita la entrada de sustancias no deseadas. Si no es posible, la utilización de batas como prenda de protección también es una buena opción. Además, se proporcionará un Equipo de Protección Individual (EPI) acorde a la función que desarrolle cada trabajador. Guantes, gafas, cascos, protectores auditivos o calzado son algunos de los elementos necesarios para trabajar en este sector.

Ante la peligrosidad de las sustancias que se manipulan en este sector, muchas veces la opción de utilizar prendas desechables es la elegida por los clientes. Así se controla que las sustancias nocivas no salgan del interior de la empresa.

Para la elección de los uniformes laborales de personal en la industria química, tomamos en cuenta propiedades como permeabilidad y penetración, además de características de rendimiento físico del producto (abrasión, rotura, resistencia a la tracción). También consideramos la resistencia de las costuras y cierres, la flexibilidad, el peso y la comodidad (es decir, el aislamiento térmico, la capacidad de transpiración, etc.)